El Teatro Lido es una sala de teatro de Medellín, Colombia, ubicado en el costado oriental del Parque de Bolívar en el centro de la ciudad. Comenzó a funcionar en 1945 y en 2007, después de una metódica restauración fue reinaugurado, y es administrado por la Alcaldía de Medellín. Tiene capacidad para 1.100 espectadores y ofrece una variada programación durante todo el año.
El Teatro Lido nació en 1945 por iniciativa de Francisco Luis Moreno Ramírez, un pudiente hombre que junto con su familia deseó contribuir a la vida cultural de la ciudad, donando el dinero para la edificación y la contratación del arquitecto Federico Vásquez y del escultor Marín Vieco, este último se encargó de la decoración del Teatro.
Todo el proceso de construcción tardó dos años y con un costó de dos millones de pesos, debido principalmente a que los materiales en su totalidad fueron traídos desde Estados Unidos como la escalera central que lleva al segundo piso, el mármol de pisos y baños, y un yeso acústico para recubrir las muros, ya que los revoques de cemento eran inadecuados, demasiados duros y generaban el choque de las ondas sonoras contra las paredes. En aquella época, era considerado el mejor teatro en acústica y contaba con capacidad para 1.400 personas. La familia de Francisco Luis Moreno vendió el Teatro en 1948 a Cine Colombia para su administración, por 900 mil pesos.
El teatro combinaba el espectáculo cinematográfico con la presentación de concertistas, pianistas como Claudio Arrau, chelistas como Pierre Fournier y el violinista Alberto Lysy» y hasta se presentaron El Emsemble Barraque de París y la Orquesta de Cámara de Berlín. El Teatreo era frecuentado por la alta sociedad para ver a las orquestas, artistas y el cine de talla internacional fomentado por el director de Promúsica, Hernán Gaviria.
Los usuarios compraban boletas por abonados para luneta a treinta pesos, balcón a veinte pesos y estudiantes con carnet en el balcón a diez pesos. Los conciertos eran los martes y a veces los miércoles a las 8:30 p.m. y continuaron por dos años más, hasta que el propietario de Promúsica murió.