En la zona alta de Buenos Aires, comuna 9 de la ciudad de Medellín, se encuentra el histórico barrio «Medellín sin tugurios», también conocido como barrio Pablo Escobar.
El conjunto de residencias se construyó hace más de 35 años. Fue una de las obras benéficas que Pablo Escobar donó a la ciudad, dando una solución habitacional a cientos de medellinenses. Fueron 250 casas las que el capo del narcotráfico entregó a sus habitantes en los años ochenta. Hoy el barrio cuenta con cerca de 5000 viviendas y un estimado de 16 mil habitantes.
El barrio surgió del proyecto Medellín sin tugurios. Fue uno de los más estigmatizados de la ciudad por sus orígenes relacionados con el narcotráfico. Sin embargo, es difícil encontrar algún habitante de este sector que reniegue de su pasado, y que no demuestre agradecimiento por el conocido capo del Cartel de Medellín.
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Es bien sabido que el barrio es el escenario de múltiples recorridos que se encargan de llevar turistas a esas históricas calles. Los extranjeros que sienten atracción por la historia de Pablo Escobar no dudan en visitar el barrio Medellín sin tugurios, donde algunos de sus habitantes se encargan de contarles la historia del barrio, y como el capo es reconocido y querido por su habitantes.
Hasta hace poco, en la entrada, por unas escaleras angostas y empinadas, se encontraba un mural con la cara del fundador del Cartel de Medellín. Pese a que el nombre original que se le dio en 1984 fue “Medellín sin tugurios”, todo el mundo lo conoce como el barrio Pablo Escobar.
A pesar del recuerdo y el agradecimiento que algunos habitantes guardan hacia el capo, otras personas que habitan allí quieren alejarse de la figura del narcotráfico que históricamente los ha perseguido. Sin embargo, en sus calles aun se pueden encontrar tiendas que vende recordatorios con la figura de Pablo Escobar. Y casas que tienen cuadros y pinturas con la figura del que consideran muchos el Robin Hood colombiano.
La nueva cara de Medellín sin tugurios
El barrio volvió a ser noticia en los últimos días gracias al anuncio por parte de la alcaldía. Allí se construirá un jardín infantil y otras obras de infraestructura. El recinto contará con 2.700 metros cuadrados y más de 10 aulas. Atenderá a niños de entre 2 y 5 años.
Según los datos de las autoridades municipales, la obra tendrá un costo de 10 mil millones. Su propósito es, a través de la inversión, darle un nuevo panorama en los habitantes del sector que históricamente han tenido un sentimiento de abandono.