Don José, se volvió reconocido en la ciudad y en el país luego de una mala experiencia que vivió, experiencia que fue grabada y que se hizo viral, causando una gran indignación en el país.
Aunque don José afirma que su vida ha dado un vuelco por completo, su cotidianidad no cambia. Pero cambio porque él se metió en el corazón de mucho colombianos, así se evidencia con cada paso que da por la ciudad y así lo siente él. Mientras camina por las calles del corazón de la ciudad, recibe múltiples saludos, sonrisas y palmaditas afectuosas en el hombro. Quienes no lo hacen, murmuran su nombre: ‘Ahí va don José’, ‘Ese es don José’, ‘Mirá a don José’.
Coge su guitarra y sale de su casa, ubicada en Campo Valdés, para salir a trabajar. El centro de la ciudad lo espera cada mañana para servirle de escenario musical.
Desde las 10 a. m. hasta el mediodía se sube a los buses y entona conocidas canciones de Olimpo Cárdenas, Óscar Agudelo, Julio Jaramillo o Javier Solís, entre otros artistas de la música popular. Después, cuando llega el mediodía, cambia de locación y va en busca de restaurantes en los que pueda acompañar el almuerzo de los demás con su voz.
Son en total dos canciones las que entona en cada lugar, antes de que las personas le extiendan la mano para entregarle un billete o una moneda. En algunos sitios se gana algo que le importa mucho más: aplausos. Se despide con la misma cordialidad y busca otro lugar, hasta las 4 p. m., cuando regresa a su hogar.
El Tiempo